Así lo confirman los datos del último estudio de Eurostat, según el cual hasta la mitad de los jóvenes de la UE entre 20 y 34 años que no tienen empleo emigrarían en su búsqueda, sea dentro de las fronteras de su propio Estado (21%), hacia otro Estado de la UE (12%) o fuera de las fronteras de la UE (17%).

Y a la cabeza de los países con mayor proporción de jóvenes dispuestos a emigrar figura Portugal (con un 71%), Suecia (66%) y España (con un 64%). De manera específica para la UE, son los países bálticos o los de los Balcanes los que cuentan con mayor porcentaje (26% para Estonia y Croacia, 25% para Eslovenia) de jóvenes dispuestos a emigrar hacia otro Estado de la UE. Bulgaria y Eslovaquia figuran a la cabeza de los países con mayor proporción de jóvenes dispuestos a emigrar a otro Estado de la UE que entre sus propias fronteras (23% frente a 12%, y 23% frente a 14%, respectivamente).

Un dato relevante para valorar la propensión a desplazarse en este sentido es la formación de los jóvenes. En este caso, hasta el 23% de los jóvenes europeos con cualificación superior se trasladaría de lugar de trabajo en su país, porcentaje más elevado que el 20% de estudios medios que lo haría, o el 21% con nivel bajo de estudios que se trasladaria. En el caso de traslado a otro país europeo, la divergencia es superior: un 16% con estudios superiores lo haría, por un 11% con estudios medios y un 10% con estudios básicos.