La fiebre del eucalipto: especulación y fuego en Galicia
l árbol, una especie inflamable que se reproduce con las llamas, ya ocupa el 28% del monte de la región impulsado por las políticas del Partido Popular gallego.
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El bosque gallego está vendido. Cada año produce más de la mitad de la madera que se corta en España, pero a cambio esconde una trampa que está llenando de cerillas una de las regiones más inflamables de Europa. El verde del bosque atlántico, el del roble y el castaño, está perdiendo terreno frente al verde del eucalipto, una especie exótica que ya alcanza casi un tercio de la masa forestal gallega y que tiene una íntima relación con el fuego.
“Yo planté y me fue muy bien”, presume Evaristo Rodríguez —mirada larga y bastón en mano— a sus 83 años en medio del monte de Froxán (Lousame, A Coruña). Para llegar hasta allí hace falta conducir media hora desde Santiago por un escarpado y solitario laberinto de caminos rurales. “Aquí nada crece como el eucalipto”, añade, y razón no le falta: en apenas quince años, el árbol está listo para ser talado y vendido, con un rendimiento de hasta 2.500 euros anuales por hectárea. El pino, por contra, necesita casi tres décadas.